lunes, 1 de septiembre de 2008

Subsidio a nuestros deportistas

Deportista que cuenta con todo mi apoyo. Creo que se llama Allison, pero es lo de menos.

Los lectores habituales de este hermoso y didáctico sitio ( uno de los últimos refugios de la cultura, sin dudas), sabrán de mi poco apego a los juegos olímpicos, pero esto no quita que como ciudadano de este hermoso país ( ¿cómo cuál?. Este, carajo. Argentina), pueda emitir mi opinión sobre el apoyo, o falta de él en realidad,que nuestros deportistas deben padecer.


Cómo no soy especialista en este tipo de cosas ( ni en ningún otro tipo, ni tampoco en tipos. Bien machito, soy), no entraré en detalles puntuales sobre los diversos inconvenientes que en todas las disciplinas del deporte soportan nuestros atletas. Basta con saber que, pongamos por caso, en una ciudad cualquiera dentro del territorio nacional, un o una joven comienza a evidenciar condiciones fuera de lo común para el salto en largo. Con seguridad, será estimulado/a por sus padres, que se sentirán orgullosos de que el fruto de su simiente ( un poco cursi, esto, lo acepto), empiece a destacarse del resto y a cosechar premios. Pero, el problema comienza cuando nuestro destacado jovenzuelo/ela, empieza a competir fuera de su ciudad, ocasionando gastos de traslados y de alojamiento, que muchas veces no pueden ser financiados por sus progenitores, frustrándose muchas veces por estos motivos, lo que podría haber sido una brillante carrera deportiva, y por qué no, una futura medalla olímpica para nuestro querido país.


Aquí es en donde tienen que intervenir los gobiernos apoyando a los destacados de cada disciplina, subsidiar sus carreras, facilitarles los medios adecuados para sus entrenamientos; en fin, apoyarlos sobre todo económicamente para que puedan potenciar sus condiciones naturales.


Esto es lo que dice un amigo mío, ese que no logro entender por qué es mi amigo, ya que estoy en total desacuerdo con sus conceptos la mayoría de las veces, no siendo una excepción el tema que estoy tratando.


Si alguien cree que es algo destacable saltar más lejos que otras personas, es alentado en semejante pavada por sus padres en un evidente deseo de ver reflejadas sus tristes vidas en el nene/a ganando unos patéticos premios en una patética competencia ( incluyo a casi todas las otras disciplinas deportivas), cometen la tristísima torpeza de dedicar varias horas diarias durante varios años a "perfeccionarse" en hacer algo más rápido, más alto o más largo, allá ellos, que lo hagan, pero por favor: ¡ No quiero que ni un peso de mis impuestos sea usado para tan estúpido fin!. Y ojo, que los cien millones de dólares en publicidad que el Michael Phelps va a ganar me importan un carajo, ya que en el último de los casos creo que es el real incentivo de muchos seudos amantes del deporte.


P.D: agradecimiento a Marcelo Pisarro ya que en parte este post fué inspirado en un artículo en el que se quejaba por un subsidio a filósofos, en su blog de la revista Ñ.Tenemos distintos puntos de vistas y muy probablemente , distintas ideologías, pero, creo, compartimos el humor y la tolerancia. Y a veces, él coincide, también con algún tema tocado en este blog. Ahora que lo pienso, ¿ No me estará robando ideas? Y encima, a él le pagan.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Ahhh...! ya me parecía que no podía ser todo tan color de rosa. También escuché directamente algo así hace muy poco, pero también-tampoco opiné, ja. Y hablando del blog de Ñ, ahora quizá me de una vuelta. Otra cosa, no pude comentar antes, porque por ejemplo, no leí El Proceso. Asimismo, qué buena foto.!

Salemo dijo...

En realidad todo lo escrito es la excusa para publicar la foto.
No tengas miedo y opiná, aunque tengas interese directamente relacionados con el deporte. Además yo "consumo" alguno de ellos, pero creo que el que quiera hacerlo, que lo haga gratis, pague o se consiga sponsors. Con mi plata no.

Anónimo dijo...

Copión.

Salemo dijo...

Es cierto. Pero nótese la hidalguía sin par del que suscribe, al reconocer los méritos primigenios ( fah, que frase me mandé)del señor mp, que no es otro que el señor Marcelo Pisarro, antropólogo y periodista estrella de la prestigiosa revista Ñ ( bueno a lo mejor no es para tanto, pero pero me viene al pelo publicitar el tipo de lectores ilustres de este humilde espacio).
P. D: a los otros, hasta al más humilde de los visitantes de este blog, también los quiero.
Salemo, el ultra demagogo.

Juan Carlos dijo...

Hola!
Soy nuevo en los blogs y como soy bastante boludo estoy muy emocionado - ya se me va a pasar (la emoción, no la boludez) - así que me entusiasmé, busqué "Spinetta" y me apareció tu blog, entre tantos otros.
Un par de cosas:
1) Adhiero en las 2 primeras oraciones.
2) Con el resto del texto discrepo. El deporte forma parte de la cultura de un país y de una persona. "Cultura" no en el sentido bastante pelotudo - creo - que le damos al término ("ay, lee muchos libros, qué culto") sino en el sentido de aquello que caraceriza, identifica y define a una persona y en parte hace que sea esa persona y no otra. No se trata de "saltar más alto" como si esto fuera una competencia para improvisados, sin trabajo previo, preparación, esfuerzo ni frutos. No valorar el deporte puede equivaler - en un punto - a no valorar el arte o la ciencia.
Lo que sí, los subsidios deberían administrarse correctamente y no como - lamentablemente - parece que se está volviendo tradición para ciertos gobiernos (piqueteros, patotas, tren bala, colegios "de utilería", etc, etc.)
Saludos!

Salemo dijo...

Discrepe nomás, hay libertad absoluta para que emitas tu opinión. Mis opiniones, como las mayorias de las opiniones, son subjetivas. Todos tenemos nuestros gustos, pero por ejemplo habrás notado que me refiero a una nota de Marcelo Pisarro quejándose de los subsidios a filósofos, cosa que sí me atrae, pero que concuerdo en que NO debe ser subsidiado. No nos vamos a poner de acuerdo en que saltar más alto o más lejos, no es más que eso y no aporta nada. Todo el esfuerzo que alguien ponga en lograr mejorar en hacer eso, me parece una cuestión personal y respetable, pero te aseguro, para ponerlo claro, No me haría sentir orgulloso que un hijo mío se destacara por eso.El deporte no necesita de mi valorización, ya está, lamentablemente creo yo, super valorizado ( ojo, yo miro futbol, soy hincha de Boca y por ahí miro tenis o el tour de Francia. Todos emprendimientos sin subsidiar, deportistas profesionales que ganan mucha plata) Ya una vez lo dijeron: cuando los héroes de un país están en un estadio, ese país está en problemas.
Saludos.
Seguí opinando cuanto y como quieras, acá no hay censura si se opina de forma diferente al que suscribe.